martes, 2 de noviembre de 2010

EL COLESTEROL






En los tejidos corporales y en el plasma sanguíneo, tenemos un lípido denominado colesterol, que si sobrepasa o no llega a unos determinados límites en sangre, puede causarnos graves problemas cardiovasculares como la hipercolesterolemia. Por ello, son muy comunes las dietas bajas en colesterol en las que se aconseja no comer alimentos básicos como el huevo o la carne.

 Hipercolesterolemia



 Esto puede llevarnos a la errónea confusión de que "el colesterol es malo". Pues no, éste es necesario para la vida ya que le proporciona rigidez a las membranas celulares, participa en la síntesis de hormonas y es la precursora de los ácidos biliares que se encuentran en el hígado y que junto con la bilis emulsionar las grasas en el intestino. Además, el colesterol lo incorporamos con la ingesta de, entre otros, los alimentos antes mencionados.
Para obtener un mayor difusión en el cuerpo humano, el lípido se une a una molécula proteica, resultando las lipoproteínas, que se dividen según su cantidad de lípido y proteína:

- Baja intensidad o LDL (colesterol malo): tienen más lípido que proteína. Liberan colesterol a las células y si sobrepasan los niveles sanguíneos, es decir, por encima de 180 mg/ 100 mL de sangre, el colesterol se deposita en las paredes de las arterias, produciendo aterosclerosis (endurecimiento de las arterias) que dificulta el paso del flujo sanguíneo <Img 07>. Si esto ocurre en las arterias coronarias puede generar un ataque cardíaco si éstas se obstruyen completamente. Y si lo hace en las cerebrales, podemos sufrir un accidente cerebrovascular.

 
LDL

Placa de colesterol



Placa de ateroma
- Alta intensidad o HDL (colesterol bueno): tienen más proteína que lípido. Retornan el colesterol al hígado y si se encuentra en buena cantidad (más de 55 mg/ 100 mL de sangre) nos preservará de las enfermedades cardíacas, la más importante la aterosclerosis.

HDL
En cuanto al funcionamiento del LDL y HDL, se dice que:
- LDL: libera colesterol que es recibido por los receptores de las células, facilitando el tránsito de colesterol a la célula. Si hay poco colesterol en los receptores, habrá poco en sangre, lo que ocasionará arterosclerosis.
LDL
- HDL: los receptores de las células atraen a las moléculas de HDL, lo que hace que la célula se estimule y libere colesterol que llegará al hígado para ser destruido por la bilis.
 
Forma de absorción del colesterol


En la siguiente imagen, se muestra como el colesterol entra en la célula gracias a un receptor específico, que mediante la endocitosis crea una vesícula. El receptor se desprende del colesterol y sale de nuevo a la superficie de la célula para volver a activarse, mientras que el colesterol pasa al lisosoma dónde se hidroliza.
En este video se realiza un viaje por las arterias junto a los glóbulos rojos y el colesterol, donde se muestra el comportamiento de éstos cuando se produce una placa.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Ácidos grasos insaturados trans

ÁCIDOS GRASOS TRANS:

Los ácidos grasos son biomoléculas orgánicas formados por cadenas hidricarbonatadas acabada en grupos carboxilos (-COOH) y con número par de átomos de carbono. Su fórmula general es: R-COOH, donde R es la cadena hidrocarbonatada. Son los constituyentes imprescindibles de casi todos los lípidos y se dividen dependiendo de su estructura en:


-Ácidos grasos saturados: cuya cadena hidrocarbonatada está repleta de hidrógenos y todos sus enlaces son simples. En lo que respecta a los alimentos, se encuentra sobre todo en las grasas animales y aceites.
-Ácidos grasos insaturados: presentan cadenas hidrocarbonatadas pero con algunos enlaces dobles entre los átomos de carbono. Están presentes en las grasas de los pescados azules y en algunas grasas vegetales. Un tipo de ácido graso insaturado es el ácido trans.



1- Definición de ácido trans.

Los ácidos grasos trans son un tipo de ácidos grasos insaturados que se encuentran en alimentos destinados al consumo humano que han sufrido un proceso de hidrogenación (proceso mediante el que los aceites se transforman en grasas sólidas).
Estos ácidos trans también se generan naturalmente en el rumen de los animales.

Planta de hidrogenación.

Proceso de hidrogenación:
como ya sabemos los ác. grasos trans son insaturados, es decir, tienen al menos un enlace doble, por este proceso conseguimos solidificarlos añadiendo higrógeno a los carbonos insaturados y, también, se modifica su estrucrura al pasar uno de los dos hidrógenos de la molécula que están en el mismo lado al opuesto y por lo tanto se dice que pasan de la posición cis (los hidrógenos en el mismo lado) a la posición trans (uno de los hidrógenos pasa al otro lado).



2- Alimentos donde podemos encontrarlos.



- Manteca vegetal
- Algunas margarinas
- Tostadas
- Galletas
- Tentempiés
- Ciertas carnes y productos lácteos
- Y algunos otros alimentos fritos o elaborados con los aceites parcialmente hidrogenados.


3- Razón de la existencia de ácidos trans en los alimentos.

Los ácidos trans, como ya hemos mencionado antes, se encuentran en aceites parcialmente hidrogenados con el fin de obtener alimentos de alta calidad, más frescos, con mejor sabor y una fecha de caducidad más amplia.
En ocasiones, los ácidos saturados se sustituyen por grasas trans para hornear y freír, ya que son menos perjudiciales que los saturados.

4- Impacto del exceso de ingesta de ácidos grasos trans en nuestro organismo.

Los ácidos trans, junto con los saturados, aumentan nuestros niveles de colesterol LDL (“malo”) en sangre, viéndose alterado nuestro perfil lipídico, es decir, la cantidad de grasas que poseemos. Esto puede originar:
- Enfermedad cardiovascular. Los trans hacen que aumente el riesgo de enfermedad cardíaca coronaria.
- Infarto de miocardio.

 
Obstrucción de una arteria del corazón.

- Resistencia a la insulina, síndrome metabólico y diabetes mellitas. Los tans favorecen desórdenes metabólicos, como por el ejemplo el de la actividad anormal de la hormona insulina.
- Cáncer. Como el de seno, colon y recto.
- Alteración del peso y tamaño del bebé al nacer debido a la excesiva ingesta de la madre de ácidos trans.

5- Correcto consumo de ácidos trans.

Piramide alimenticia.

De las calorías que tomamos a lo largo del día, se recomienda que como máximo un 1% de ellas sean ácidos insaturados trans. Para disminuir su consumo deberemos llevar una dieta equilibrada, dándole prioridad al pescado, a la fruta, a la verdura y comiendo las mínimas grasas posibles.

miércoles, 6 de octubre de 2010

El sodio en nuestro organismo

El sodio es un mineral muy importante para nuestro cuerpo que permite un procedimiento de ósmosis. El sodio se encarga de regular el equilibrio de líquidos de nuestro cuerpo junto con el potasio. También ayuda en el proceso digestivo manteniendo una presión osmótico constante y adecuada, además de ayudar con los impulsos nerviosos en las células.

Tanto el exceso de sodio como la escasez pueden tener importantes consecuencias para nuestro organismo:

  • Exceso de Na: aumenta la presión sanguínea, por lo que genera hipertensión, problemas de corazón o del riñón.
  • Escasez de Na: disminuye la presión sanguínea y se manifiestan mareos y deshidratación.

Para entender mejor el funcionamiento del sodio en nuestro organismo, hay que estudiar la ósmosis. La ósmosis es un sistema que regula la concentración de sales tanto dentro como fuera de la célula. Esto ocurre gracias a una membrana semipermeable que tan solo permite desplazarse al agua a través de ellas y no a los solutos. Si la célula tiene una concetración mayor al medio externo, el agua entrará a la célula a través de la membrana para que la concentración sea isotónica, y si en la célula hubiera una concentración menor, pasaría al contrario.

Ésto se debe a que el agua es una molécula polar, y al introducirse una sal en el organismo se siente atraída por su carga y el agua pasa en la dirección que se encuentra la sal, separándola en iones.

Si en nuestro organismo sucede un pequeño exceso sodio, los osmoreceptores del hipotálamo son los encargados de detectar la concentración de agua, y al ser baja respecto a la sal, producirá una sensación de sed para equilibrar la concentración.

El riñón filtra el volumen plasmático cada 5 minutos, por lo que el sodio y el agua se filtran. Sin embargo, la mayoría vuelve a ser reabsorvida (el sodio de manera activa, y el agua como atracción del sodio). El agua y Na que no se absorven es excretado en la orina.